qué somos

No nacimos para seguir las reglas. Nacimos para cuestionarlas (y a veces

reírnos de ellas). Somos kombucha, soda y champán… pero no como los co-

nocías. Fermentamos ideas. Destapamos prejuicios. Y enlatamos una forma

de vivir: más real, más fresca, más consciente.

Somos una marca de bebidas con pre y probióticos, muy baja en azúcar y

calorías, pero con un sabor que te hace decir: ¿¡esto es sano!? Sí. Es sano. Y

sí, está brutal. (Sorprendente, lo sabemos. Nosotros también lo dudamos la

primera vez).

No pretendemos ser perfectos, pero sí genuinos. Tampoco buscamos agra-

dar a todo el mundo, sino conectar con quienes reconocen lo real cuando

lo prueban. Nos mueve la curiosidad, la irreverencia y la belleza, pero no la

belleza vacía, sino la que tiene un porqué, una intención, y una historia fer-

mentada con tiempo y propósito.

Creamos desde la entraña, desde las emociones, los recuerdos y desde el

juego. Nos tomamos en serio la calidad, pero no la rigidez (no somos un

seminario de nutrición, tampoco la típica marca “pachamama” con colo-

res sepia, hadas volando ni logotipos con hojas verdes, no os preocupéis).

Apostamos por lo que se siente bien y se hace bien, sin postureo ni artificios.

Cuidamos lo que hay dentro sin olvidar lo que pasa afuera: el diseño, la con-

versación, la experiencia. Todo importa.

Podríamos decir que somos una marca. Un ritual moderno. Un placer sin cul-

pa. Pero preferimos pensar que somos una forma de estar en el mundo: con

humor, con principios y con ganas de ofrecer algo que valga la pena. Esto no

va (solo) de beber. Va de elegir mejor. De sentirte bien sin dejar de disfrutar